27 de setiembre - Día
mundial del Turismo.
-En Trujillo, nada que
celebrar-
Del
otro lado del planeta, en Budapest –Hungría, hoy 27 de setiembre, se celebra
oficialmente el día mundial del Turismo. Esta ciudad tiene un crecimiento
constante en el sector turístico, la razón por la cual ha sido elegida para
realizar las celebraciones mundiales.
La
foto del día lleva a una reflexión de las políticas de crecimiento y desarrollo
de los destinos, mundiales, frente a los impactos –negativos- que la gran
industria genera. Lejos de pensar o alucinar que el turismo es una industria
sin chimeneas, es en realidad, una de las más contaminantes del planeta. En tal
sentido, la siguiente reflexión expone nuestra realidad turística, puntual en
donde más adolece la gestión pública.
Evidentemente,
a nadie le gusta que le digan las verdades, o mejor dicho las críticas constructivas.
Pero somos contribuyentes y los funcionarios han sido elegidos por voluntad
ciudadana, y todas sus gestiones son pagadas con nuestro dinero. Los
funcionarios, suelen pensar/imaginar que están haciendo la mejor gestión
pública y asumen que todo está construido. La lista de los problemas que
bloquean el desarrollo del destino turístico “Trujillo”, es larga, seguimos en
lo mismo de hace más de 20 años; y nadie se quiere comprar el pleito.
CENTRO HISTÓRICO MONUMENTAL DE TRUJILLO
En
el destino Trujillo, ninguno de sus atractivos está consolidados. El desarrollo
de éstos ha sido impulsado por el sector privado, es este sector a falta de políticas
claras y transparentes que –históricamente- las han creado. Los funcionarios de
turno, supeditados a las políticas nacionales, o mejor dicho a los intereses
centralistas, han seguido en piloto automático, descuidando e ignorando todo. En
términos de señalización, conectividad, prestación de servicios y formalización
de éstos, infra estructura y políticas de accesibilidad; el destino Trujillo está
en pañales y de retroceso.
Caminar
por el centro monumental de la ciudad, es exponerse a una agresión visual. No
hay respeto por las normas (¿existen?) de colores de fachadas, avisos publicitarios,
espacios de uso público para el contemple y apreciación de sus edificios de
importancia arquitectónica e histórica. Los semáforos, los pocos que existen,
son semáforos para autos, excluyendo a los peatones. Una aberración y muestra
de que tan lejos se está en el respeto al peatón es en el cruce del paseo
peatonal, jirones Pizarro y Estete, para acceder a la Plazuela del Recreo. Los
pocos serenazgos y policías que merodean la zona andan entretenidos en otras
cosas que mejorar la transitabilidad y respeto al peatón.
Las
casonas trujillanas, que promperú y la municipalidad de Trujillo promocionan,
están abiertas en horario de oficina. Las otras, no se sabe cuándo visitarlas, depende
del estado de animo de la institución que tiene su gestión. Lo peor es que todas
están cerradas los fines de semana. Considerando que, para el turismo nacional,
la gente viaja los fines de semana, el centro histórico solo puede ser visitado
del exterior. Los días feriado aún peor, los visitantes lo único que pueden
hacer es caminar, cuidándose de no ser atropellados por los autos, y apreciar
solo las fachadas de una falsa publicidad. En efecto, es falsa publicidad
incitar a visitar una ciudad, generar expectativas al potencial turista. ¿Los
funcionarios saben lo que ocasiona generar falsas expectativas en los
visitantes?
CHAN
CHAN
De
otro lado, los monumentos arqueológicos que integran la Ruta Moche, en nuestra
Región, tienen mucho aun por consolidar. Salvo Huaca de la Luna y El Brujo, los
otros sitios están enajenados de lo que implica ser un atractivo turístico.
Nik-An, el cual integra la monumentalidad del sitio UNESCO de Chan Chan, es el
más promocionado por la industria turística y el más enajenado del sector. El
gran esfuerzo, de sus gestores, se resume el haberlo abierto al turismo, pero
sin implementar nada –en términos de gestión turística- para que sea turístico.
En todo caso deberían cerrarlo, temporalmente, mientras lo implementan para ser
visitado al nivel de su categoría universal y con accesibilidad inclusiva.
HUANCHACO
El
balneario de Huanchaco, está a punto de ser solo un destino gastronómico. Los
impactos negativos del molón de Salaverry han destruido sus playas y es
irreversible mientras éste continúe allí. En tal contexto, tanto el cultivo de
la totora como la pesca ancestral, en caballito de totora, están a un minuto de
ser un fresco recuerdo.
BASURA
y ESCOMBROS
Las
vías de acceso a todos los lugares abiertos al turismo se encuentran bordeadas
de basura, desmonte y escombros. Hay sectores que dan la impresión estar
atravesando muladares y al fondo, detrás de éstos, emergen los sitios arqueológicos.
Asimismo, la huella del “niño costero” está en toda la ciudad. Ha pasado menos
de dos años y la frágil memoria nos ha hecho olvidar los estragos. Nadie, del
sector público de turismo, se ha pronunciado enérgicamente al respecto.
¿Protegen con el silencio a sus mentores? La lluvia –parecía orín de gato- de
ayer, 26 de setiembre, hizo renacer el trauma y para hoy ya todos lo han
olvidado otra vez.
En
tal contexto ¿Existen razones para celebrar el día mundial del turismo en
nuestra ciudad? Aparentemente sí. Las redes sociales están inundadas de la
buena onda y de las bondades del turismo. Además, coincide con el espíritu de
la capital de la primavera y de la cultura, o sea de la ciudad de Trujillo.
Hasta
hace unos años pensé que la ausencia de profesionales en turismo, en el sector
público, era la razón por la cual no se avanzaba en el desarrollo del destino
Trujillo. Me he equivocado, esa no es la razón. Debe ser algo más, que estimo
los funcionarios, cuando terminen su periodo, recién lo dirán, siempre es así.
Llevo
apenas 20 años en el sector turismo, he viajado y conocido algunos países por
el mundo. En cada viaje he interiorizado sus realidades –turísticas-. Estamos a
30 años de llegar al nivel del desarrollo de otros destinos como Francia o
España. Es inaceptable que un restaurant ubicado frente al mar, su lista de
precios sea 200 veces más alta que de un restaurant local, ubicado a menos de 20
metros. Es inaceptable que detrás de un hotel existan familias viviendo
enajenadas de los servicios básicos de salud y educación. Es inaceptable e
indignante que la gestión pública del turismo enajene de su patrimonio a la
población local.
En
tal sentido, estamos bien lejos de celebrar una actividad que, hasta el momento,
es excluyente ampliando las brechas de separación social y económica en la
población del destino.
El
día que los funcionarios comprendan que han sido elegidos para trabajar por su
gente, por su ciudad y por la salud del planeta, aquel día quizá podremos
celebrar el día mundial del turismo. Por ahora, debemos pensar en lo mucho que
nos falta construir, nunca es tarde.
Víctor
Corcuera Cueva
Trujillo,
27 de setiembre de 2018.